¿Cuáles son los beneficios de la actividad física en salud? Segunda parte
Como hemos estado viendo, existe evidencia conclusiva de que la práctica regular de actividad física mejora nuestra salud y bienestar. En nuestra última publicación hablamos especialmente de los beneficios asociados a la salud cardiovascular y metabólica.
En esta entrada estaremos hablando de los beneficios asociados a la reducción del riesgo de padecer cáncer, enfermedades del sistema osteomuscular y salud mental.
La actividad física reduce el riesgo de desarrollar varios tipos de cáncer, entre ellos el de mama y el de colon. Entre los mecanismos propuestos para esta protección están un mejor balance energético y hormonal, así como de la circulación sanguínea, una mejor respuesta del sistema inmune y la mejora de los procesos en los que se reparan los genes.
Por ello, varios organismos internacionales de salud recomiendan la práctica de actividad física regular entre 30 a 60 minutos diarios al menos 5 días por semana con el fin de reducir el riesgo de cáncer.
En cuanto al aparato osteomuscular, se ha encontrado que la actividad física es esencial para mantener una salud óptima de este desde la infancia hasta la adultez, ya que mejora la densidad de los huesos y previene su descenso asociado con la edad. Adicionalmente, la práctica regular de actividad física, mejora y mantiene la masa muscular a lo largo de la vida. Estos dos beneficios juntos, reducen el riesgo de caídas y sus complicaciones tales como las fracturas, en personas de edad avanzada, las cuales se relacionan con pérdida de la funcionalidad y la calidad de vida.
Para obtener estos beneficios, es importante que dentro de la actividad física semanal se realicen actividades en las que se soporte el peso del cuerpo como caminar, por ejemplo, así como actividades con peso adicional las cuales son características del ejercicio de fortalecimiento.
Por otra parte, en pacientes con osteoartrosis diagnosticada, se ha demostrado que la actividad física mejora el dolor, la función articular y disminuye la discapacidad. Dentro del plan de ejercicios es recomendable que se incluyan ejercicios de flexibilidad.
En cuanto a la salud mental y calidad de vida, existe evidencia que señala que la actividad física está asociada a mejoría de las funciones cognitivas como la atención, la memoria y la velocidad de procesamiento. Adicionalmente, se encuentra una fuerte evidencia relacionada con la reducción de los episodios de depresión en adultos y adultos mayores, así como de los niveles de ansiedad. También mejora la calidad de vida y del sueño en diferentes grupos poblacionales, especialmente los adultos entre 18 y 65 años.
Es por estas y muchas más razones que aquí, en MoviéndoSe, estamos comprometidos con la práctica regular de actividad física, ejercicio y deporte.
¡Actívate y no te detengas!
Dra. Julie Leon
Medico del Deporte
En alianza con https://www.moviendose.co/